Llega la época en la que a todos nos apetecen platos más frescos de los que acostumbramos a comer en invierno. Comemos más ensaladas y empezamos a hacer gazpacho, salmorejo, ajoblanco y un largo etcétera.
Es en ésta época cuando en nuestra casa nunca falta una buena olla llena de gazpacho en la nevera, nos gusta tanto que hasta tenemos un par de litros en brick para una emergencia :) Ya, no es ni parecido, pero ayuda a calmar el mono en las calurosas noches de verano.
Ni de lejos sigue la receta más tradicional, aunque… ¿cuántas variedades de gazpacho hay hoy? ¿Tantas como cocineros? Que si a unos les gusta más líquido y a otros más espeso, luego están los que le echan hielo, con pan o sin pan, vinagre o limón, con o sin comino, con guarnición de verduras o de frutas; y así podríamos estar todo un día. La receta que traigo hoy no es ni más ni menos que el gazpacho como lo hago en mi casa.
En mi caso, avanzo que no uso nada de pan, tampoco uso comino y en vez de vinagre uso limón. No le echo pan porque tampoco añado agua, me gusta espeso y que sepa bien a las verduras con las que lo hago, si además echase pan sería una pasta más que una sopa; no uso vinagre porque no me gusta, en cambio el limón me encanta y en casa lo uso para sustituir el vinagre en todo (salsas, ensaladas, etc.); el comino me encanta pero es tan fuerte que mata el resto de sabores, da igual cuánto eche siempre acaba sabiéndome todo a comino, así que fuera comino.
INGREDIENTES
- 750 g tomates maduros
- 200 g pepino (1 pepino grande, aprox.)
- 1 pimiento verde italiano pequeño
- 1 ajo pequeño
- 75 ml aceite
- 1/4 limón zumo
Otros ingredientes
- Sal
- Opcional: cebolla pequeña
PREPARACIÓN
1.- Si no tenéis robot de cocina o pasapurés, pelad los tomates y partidlos en 4 para quitarles las semillas. Si lo tenéis olvidad éste punto.
2.- Pelamos el pepino, le quitamos las semillas al pimiento y partimos el ajo por la mitad para quitarle el germen. Si queréis que el ajo se note no le quitéis el germen, según me dé unos días se lo quito y otros no. Con la cebolla me pasa lo mismo, la echo según me apetezca ese día o no.
3.- Cortamos todas las verduras en trozos y echamos todos los ingredientes en el recipiente dónde vayamos a batirlo. Batimos bien.
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4.- Echamos sal al gusto y mezclamos. Corregid en este punto lo que creáis conveniente (añadid algo de agua si resulta muy espeso para vuestro gusto, probad el punto de limón, añadid algo de ajo si os gusta más fuerte, etc.).
5.- Si hemos usado un robot de cocina ya tendremos nuestro gazpacho listo para meter en la nevera, si lo hemos hecho con batidora lo pasamos por el pasapurés para eliminar pieles y semillas. Yo lo hice con un robot, no tiro ni media gota de vitaminas :) La textura es muy fina y cremosa, apenas se ve una pielecilla del tomate.
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Ya tendríamos hecho el gazpacho, enfriad bien antes de servir. Si vais a servirlo con hielo tenedlo en cuenta antes de añadirle agua si lo hacéis, con el hielo añadiréis una buena cantidad adicional.
Las guarniciones que uso cada día dependen también del pie con el que me levante. Lo mismo echo un puñado de frutas troceadas al tazón; como que lo sirvo con unos croûtons y un poco de tomate, cebolla, pepino y tomate picados; o simplemente me sirvo un vaso para refrescarme y quitarme la gusa.
Hoy tocó un puñado de frutas