Tarta de calabaza y chocolate

Llega el otoño y para mí es sinónimo de calabazas. No conozco a nadie que haya probado esta tarta y no se haya enganchado a ella desde el primer bocado, ¡avisados estáis!

 

Comí esta tarta por primera vez en Denia, donde paso largas temporadas cada año, y un día me harté de tener que bajar a la pastelería o al restaurante donde suelo comprarlas, los 2 a 1 minuto de casa. No requiere de ingredientes que no tenga habitualmente en casa, así que se acabó el depender de horarios de apertura, disponibilidad, luchar contra la vaguería de bajar a comprarlas y demás gaitas.

Otra de las cosas buenas a la hora de preparar esta tarta es que no necesitas más que un horno para hacerla, ni siquiera batidora y, salvando los tiempos de horneado, se prepara en poquísimo tiempo.

¿Necesitáis algo más para convenceros y hacerla en casa? Vamos a ello ;)

 

 

INGREDIENTES

• 600 g de calabaza
• 400 g de requesón
• 3 huevos
• 150 – 200 g de azúcar
• 100 ml de nata para cocinar
• 100 g de chocolate negro (troceado o en pepitas)
• 1 cucharadita canela en polvo

Ingredientes para la base

• 200 g de galletas ‘tipo Digestive’
• 100 g de mantequilla

Otros ingredientes

• Aceite vegetal
• Azúcar

 

 

PREPARACIÓN

 

1.- Pelamos la calabaza y le quitamos las semillas. Embadurnamos los trozos con aceite, yo de girasol, y los rebozamos en azúcar.

 

2.- Asamos la calabaza en una bandeja sobre papel vegetal durante 1 hora aproximadamente en el horno previamente precalentado a 200º. A los 30 minutos le damos la vuelta para que se haga uniformemente. Pasada 1 hora, al pincharla con un cuchillo, debería estar tierna, si no fuese así la dejaríamos el tiempo necesario hasta que estuviese tierna comprobándolo cada 15 minutos.

 

3.- Cuando la calabaza se haya enfriado la mezclamos en un recipiente con el requesón y el azúcar. Estará tan tierna que se deshará con un tenedor.

No soy muy fan de postres muy dulces, yo suelo usar 150 g de azúcar, pero si usáis 200 g no hará que la tarta sea súper dulce.

 

4.- Batimos los huevos, los mezclamos con la nata e incorporamos la mezcla al recipiente donde tenemos la calabaza mezclándolo todo de nuevo.

 

5.- Añadimos la canela, esencia de vainilla, las pepitas de chocolate y mezclamos.

 

6.- Deshacemos las galletas en un cuenco y las mezclamos con la mantequilla que tendremos a temperatura ambiente formando una pasta.

El día que hice la tarta de estas fotos tenía un antojo de chocolate aún mayor del habitual y usé galletas de chocolate, ¡como me alegré de haberlo hecho! :)

 

7.- Embadurnamos con mantequilla un molde de horno de unos 25 cm y espolvoreamos un poco de harina. Formamos una base uniforme con la pasta de galletas y mantequilla y dejamos que enfríe en la nevera durante media hora como poco antes de añadir la mezcla de calabaza.

 

8.- Horneamos la tarta durante unos 45 minutos en el horno previamente precalentado a 180ºC. Ya sabéis, para ver si está bien cocida haced la prueba del palillo y éste tiene que salir seco. Ojo, seco, puede que salga algo manchado de requesón; si está seco la tarta estará terminada.

 

9.- Dejamos que se enfríe durante 10 minutos antes de desmoldarla sobre una rejilla y esperamos a que se enfríe por completo. La guardaremos en la nevera durante al menos 2 horas antes de comerla, si podéis resistir la tentación ;)

 

 

El chocolate negro combina increíblemente bien con la calabaza, pero si decidís hacerla con galletas normales y sin chocolate tendréis una tarta muy distinta e igualmente deliciosa. Probadla un día también, yo no dejo de experimentar con distintas mezclas, ¡me encanta la calabaza!.